Para León
Vienes de otras vidas
Ávido de enseñanzas
Te prendes de las
entrañas
Un corcel de ángeles
Te dará la
bienvenida.
Nadando en el vientre
Jugando a las
escondidas
Creciendo valiente,
Lanzandote al vuelo.
A acompañar a tu hermano
Vienes a este mundo
Bravío León, cándido
felino
Con orgullo y amor,
Lauti tomará tu mano.
Tus raíces maternas
Juegan con los genes
paternos.
Eres único, más allá
de ellos
Eres uno en todos.
Tu estrella es
eterna.
De la mitra su
fragancia
Dulce perfume a
vainilla,
Miel y jenjibre.
Unción de aceites,
Enaltece tu
elegancia.
Con el aire de la
primavera,
El perfume de
azahares
La brisa cálida,
La ilusión de tu
llegada
Nunca será pasajera.
Séptimo mes, pesa
El vientre…
Las enchidas caderas
Se hacen eco de tus
movimientos
Cual reptil busca su
presa.
En el alba y su
serenidad,
Cuando el sueño
abandone,
Mis labios susurran
viejas melodías
El cuarto se llena de
luz.
Todo es claridad.
Jineteas febril y
fuerte,
Audaz pequeño
caballero
En tierno carrusel materno
Con hidalguía y garbo
Sacas la sortija de
la suerte.
Empezaste un viaje,
Ligero de ropas,
Liviano de cargas,
Manos al viento,
Hasta el último
peaje.
Gracias por habernos
elegido,
Por la travesía de
estos meses,
Por compartir
nuestras ansias
Por aceptarnos tal
cual somos.
Gracias por haber
nacido!
Stella, 29 de diciembre de 2014